Cómo ver más allá de la incertidumbre

incertidumbreEn poco tiempo muchas cosas han cambiado en nuestra vida. La pandemia nos ha sacudido como si fuera un vendaval y estamos comenzando a vislumbrar que lo que conocíamos ya no es posible o no funciona.

Te invito a ojear cualquier revista o dominical del mes de marzo:  los protagonistas de las fotos y entrevistas aparecen a cara descubierta en los shoots de moda y  nos presentan el vestido perfecto para un evento multitudinario y las reseñas nos hablan de los últimos estrenos. Esos escenarios hoy son caducos o están muy limitados.

Pero en marzo aun no lo sabíamos. Y ahora tenemos que admitir que tampoco sabemos lo que vendrá. La incertidumbre nos angustia.

Mi antídoto personal para la incertidumbre es la curiosidad.

Se trata de observar lo que sucede en tu entorno, en tu trabajo, en tu sector, de forma desapasionada. Se trata de sustituir el juicio por la atención. No juzgues, no te culpes, no te enfades: estudia lo que ves.

En la vida no hay vacíos: frente a la destrucción de la pandemia están apareciendo nuevas tendencias.  ¿Qué tipo de consumos está creciendo? (los contenidos audio, por ejemplo). ¿Qué tipo de comportamientos está creciendo? (la digitalización de la cotidianeidad,…). ¿Qué nuevos problemas están surgiendo? (la necesidad de tener una oficina en casa… ) ¿Dónde te puedes insertar tú en este nuevo tablero?

No te juzgues ni culpes. El juicio y la culpa empañan tu mirada y dificultan que detectes las oportunidades. Alíate con la curiosidad.

Si escribes, sabes que la incertidumbre forma parte de la experiencia editorial.  Cuanto mejor conoces el sector, más oportunidades certeras tienes para tu obra. De esto hablamos en la segunda edición del Curso de Marca personal para escritores.  Puedes leer la opinión de Jose Soler, autor de Lo nuestro no es raro y alumno de la primera edición, en esta entrevista.

La ilustración es de Tyler Spangler

Suscríbete y haz que tu talento sea más visible.

4 comentarios en “Cómo ver más allá de la incertidumbre”

  1. En unas cuantas conversaciones durante las últimas semanas, ha surgido la inquietud de que, aunque hay un sentimiento generalizado de que esa «nueva normalidad» debería tener algo nuevo:

    (1) No está claro cómo y quién se encarga de proponerla, si es que hay alguien en ello.
    (2) Hay gente que desearía compartir inquietudes y propuestas al respecto, pero echan en falta un «ágora», una plaza en la que explorar y avanzar posibilidades.
    (3) Aumenta la desconfianza en que los poderes públicos quieran, sepan o puedan generar respuestas a la altura de las circunstancias.

    Esa inquietud ya existía, pero mis conversantes encuentran que se ha acentuado.
    Las redes sociales, cada día más polarizadas, no son la respuesta.
    Sólo eso, de moemnto. Aunque podría haber más no muy tarde.

    Un abrazo

    1. Reconozco el sentimiento, Ricard. Y lo describo con una de mis dos palabras favoritas: «desasosiego» (la otra es «consuelo»). Gracias por compartir.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *